Qué hacemos
Agricultura
Además del deseo de producir nuestros propios alimentos y ser así lo más autosuficientes posible, uno de los anhelos primordiales de los participantes en el proyecto siempre fue honrar y respetar la tierra que nos acoge practicando una agricultura ecológica y/o biodinámica.
Hoy en día somos autosuficientes por lo que respecta a verduras y frutas, frutos secos, hierbas aromáticas, trigo, heno y avena para los animales (caballos y cabras).
Tenemos un rebaño de cabras que nos permite elaborar quesos y yogur.
También profundizamos en el estudio y el uso de las plantas autóctonas y/o salvajes, que usamos tanto con fines alimenticios como medicinales y cosméticos o higiénicos.
Producimos vino y miel, así como nuestro propio aceite de oliva, elaborado de forma totalmente artesanal con un viejo molino de piedra.
Cocina y Salud
Nuestra cocina es esencialmente vegetariana y permanentemente actualizada en función de los nuevos conocimientos sobre la influencia de la alimentación en la salud.
Elaboramos también menús hipotóxicos, así como menús que favorecen el equilibrio ácido-básico del organismo.
Desarrollamos nuestras propias recetas, pero nos inspiramos de todas las cocinas del mundo. Los ingredientes procedentes de nuestros huertos son tratados con cuidado y respeto, los tipos de cocción son suaves. Todo es sabroso y sano.
Cultivamos el máximo posible de plantas medicinales, y elaboramos nuestros productos de higiene y cosmética...
Educación y Pedagogía
Nuestro propósito consiste en dar a nuestros hijos una educación holística, que aspira no sólo a la integración de los contenidos académicos sino también a abrirles puertas hacia el conocimiento de sí mismos.
También nos implicamos en prepararles para el descubrimiento de su lugar en el mundo y el conocimiento de la sociedad en la que vivimos, así como la importancia de las buenas relaciones humanas.
Damos una gran relevancia al contacto con la naturaleza y el mundo animal: nuestros niños aprenden a cultivar las verduras y cereales que luego van a comer, a hacer el pan y los quesos, y aprenden también formas de cocina equilibrada. Viven pues en armonía creativa con el entorno.
A través de la expresión artística, sea cual fuere, desarrollan su potencial creativo, y aprenden a conocer y expresar su singularidad de forma constructiva.
Arte y Creación
Para nosotros, el ARTE con mayúsculas es el arte de vivir: honrar, respetar y cuidar el entorno en el que vivimos; desarrollar relaciones personales armoniosas, intensas y creativas; crear belleza en el lugar y en las formas en las que se desarrolla nuestra vida; crear consciencia tanto individual como colectiva; favorecer el máximo desarrollo del potencial de nuestros hijos; preparar nuestra comida para que además de sana sea sabrosa y placentera; gestionar conflictos desde el respeto total a la persona.
Dicho esto, queremos subrayar el gran valor que damos a la creación artística, en cualquiera de sus expresiones: pintura y dibujo, escritura, música, joyería, costura, marionetas, teatro, etc.
El arte no solo nos conecta con el potencial creativo de cada uno, sino que sirve de vehículo para encauzar y potenciar determinados momentos de la evolución de la persona, hasta convertirse en un elemento clave de nuestra evolución, tanto de forma individual como colectiva.
Desarrollo Humano
El desarrollo humano se encuentra en el corazón de nuestro proyecto. La vida en comunidad, la vida en armonía con la naturaleza o la agricultura ecológica adquieren su sentido solo en la medida en que favorecen dicho desarrollo humano en sintonía con los tiempos de cambio profundo que vive la humanidad.
La inspiración de los fundadores se nutrió de la Psicología Jungiana y de su concepción de los sueños como vía regia para acceder, conocer y transformar nuestra sombra. Como en la tribu Senoi, el hecho de contar sus sueños al grupo, creó un marco seguro en el que cada uno puede mostrarse en su totalidad, tal como realmente es, sin recibir de los demás más que respeto, empatía y apoyo.
Por lo demás, es a través de las relaciones humanas y la convivencia que tiene lugar la experimentación que permite a cada ser humano avanzar en su individuación. La individuación es un proceso que nos hace cada vez más únicos, más completos, pero que, en paralelo, nos acerca cada vez más a los demás.
La creación artística ha sido también un elemento clave en el desarrollo de nuestro potencial creativo, individual y colectivo. Ciertas composiciones musicales colectivas o montajes teatrales han supuesto hitos indelebles de nuestra evolución como grupo.
Pero no hemos dejado de buscar y experimentar, integrando así un sinfín de conocimientos y herramientas en muy variadas dimensiones, al servicio de la evolución de los miembros del grupo así como, en muchos casos, de las personas que nos visitan. Dichas herramientas abarcan áreas tan dispares como técnicas de salud natural (homeopatía, reflexología,nutrición,), equitación e hipoterapia, trabajos de tipo energético (EMF, Chi-Kung, Shiatsu, meditación), trabajos corporales (Pilates, masajes,Tai-Chi), técnicas de liberación y sanación emocional (ICV, EMDR, Arteterapia, Esencias), trabajos grupales y sistémicos, gestión de conflictos (psicodrama, constelaciones familiares y organizacionales).
Dicho trabajo sobre uno mismo y sobre nuestras relaciones ha generado con el paso de los años una mayor apertura hacia la dimensión espiritual de la existencia, entendida como una capacidad para permanecer abiertos, receptivos ante lo misterioso y lo desconocido; dispuestos a integrar a una parte cada vez mayor de nuestro ser; a trascender nuestros límites; a permitir que emerja el sentido último de cada experiencia.
Al entender e integrar progresivamente la dimensión espiritual de nuestras vidas, nos movemos y crecemos en contacto con esta energía, que circula por el tiempo y el espacio para crear y sustentar toda vida. Mediante la práctica espiritual llegamos a conocernos a nosotros mismos en relación interdependiente con los demás, con la vida y con el universo, lo que nos ayuda a crecer en humildad, confianza y apertura. Esto despierta inevitablemente una profunda y duradera gratitud.
Sociocracia en Los Portales
En octubre 2015, descubrimos la sociocracia en un taller de seis días de la mano de Gilles Charest, consultor empresarial canadiense con más de 25 años de experiencia en sociocracia, y de Mauge Cañada, psicóloga y facilitadora, con más de 30 años de experiencia en gestión colectiva y comunitaria.
Gilles Charest se formó directamente con Gerard Endenburg, el “padre de la sociocracia moderna” y, además de ser uno de los socios directivos de The Sociocracy Group, es el responsable del departamento de educación; imparte desde hace más de dos décadas talleres especializados en el empleo del método. También es el autor de « ¡La democracia se muere, que viva la sociocracia! »
Durante esos seis días, estuvimos trabajando tanto sobre la « sociocracia interna », escuchando nuestras « voces internas » para negociar decisiones personales, como sobre la « sociocracia externa » con grupos de personas de cualquier tamaño, para que se gestionen de forma orgánica. También nos estuvimos familiarizando con los diferentes perfiles de liderazgo con « La rueda de los talentos », una herramienta diseñada por Gilles Charest, que nos da informaciones muy valiosas sobre nuestro estilo de liderazgo y permite una colaboración más consciente dentro del equipo.
De un sueño…
Auguste Comte (1798-1857), filósofo francés y padre de la sociología, fue el primero en usar la palabra “sociocracia”, el gobierno de los socios, que, según él, era el único camino justo :
«Venimos, pues, abiertamente a liberar a Occidente de una democracia anárquica y de una aristocracia retrógrada, para construir, tanto como sea posible, una verdadera sociocracia, que haga concurrir a todas las fuerzas humanas aplicadas siempre, según su diversa naturaleza, hacia la regeneración común. Nosotros, los sociócratas, no somos ni demócratas, ni aristócratas » (« Catéchisme positif », 1852, p. 2)
Pero sólo era una teoría, un sueño académico que nunca dio lugar a acciones concretas…
El método sociocrático moderno fue desarrollado por el ingeniero electrónico holandés Gerard Endenburg (1930-). Le influyeron la teoría cibernética y los valores que había recibido en su infancia en « La Fábrica », una escuela dirigida por Kees Boeke, un pacifista holandés, a la que trajo la sabiduría de los « quakers » para las tomas de decisiones en consenso entre profesores y estudiantes. Cuando tuvo que tomar la dirección de la empresa familiar, decidió adaptar esos valores de equivalencia y transparencia a la gestión de Endenburg Elektrotechniek. La sociocracia moderna había nacido.
… a una realidad
"El método sociocrático reposa en cuatro reglas básicas: toma de decisiones por consenso, estructura por círculos especializados e interconectados, flujo bidireccional de información entre estos grupos y elecciones abiertas sin candidato previo”, explica Gilles Charest. Según él, para implantar la sociocracia en una organización, hay que crear primero un grupo piloto que, una vez formado y habiendo adquirido las reglas básicas, podrá diseñar una estructura con el apoyo de un experto sociocrático.
Nuestro camino hacia una nueva organización.
Unos meses después de este primer contacto en octubre de 2015, se presentó la herramienta a todo el colectivo de Los Portales y se creó un grupo de trabajo encargado de diseñar una estructura sociocrática para Los Portales. Fue presentada y aprobada en marzo de 2016. Poco después, tuvimos la suerte de tener a Gilles Charest y a Ghislaine Cimon en Los Portales para dar una breve formación a todo el colectivo.
Nos organizamos en Círculos para la gestión de los diferentes dominios. Cada círculo gestiona su área de forma autónoma y cada mes hay una reunión del Círculo General que reúne todos los coordinadores y los dobles enlaces de cada círculo para presentar los avances de los mismos y tomar decisiones que van mas allá del ámbito de un círculo particular (por ejemplo, decisiones sobre el reparto de los presupuestos).
Adaptamos el modelo sociocrático a nuestra realidad y nuestra visión y seguimos moldeándolo a medida que avanzamos en nuestro camino. Por otra parte, seguimos formándonos. Algunos de nosotros trabajamos con John Buck, autor en colaboración con Sharon Villines de « Nosotros, el pueblo, acordando una democracia más profunda », viajero incansable y « embajador » de la sociocracia. Otros estuvieron en un taller con James Priest, para estudiar y difundir la Sociocracia 3.0 o S3. Se llevó a cabo un taller de S3 en Los Portales y otro en Amalurra a partir de esta formación.
Para terminar, actualmente compartimos nuestra experiencia sociocrática a través de talleres en Los Portales. (más información : charlie.lenglez@yahoo.es)